Como ya os avanzaba en el post de «Qué ver en Ámsterdam«, hoy os traigo la segunda parte de nuestro Tour por los Países Bajos y os llevo de ruta a conocer algunos de pueblos con encanto cerca de Ámsterdam: un plan perfecto para completar vuestro viaje a esta ciudad tan preciosa.
Prepárate para descubrir que existen pueblos con el nombre de los quesos que te has comido desde niño!!!! jajaja y a entrar literalmente en escenarios de postal o de película porque va a ser continuo… lleva la batería de la cámara o móvil a tope porque os vais a hartar de inmortalizar rincones…. ya os aviso :-).
Ruta Zaase Schans-Edam-Volendam-Marken
El primero de los itinerarios que os propongo os va a chiflar, pues os va a permitir conocer muchas de las raíces y cosas típicas de Holanda… quesos, zuecos, canales, y muchas cosas más!!! Nos iremos hacia el norte de Amsterdam, tal y como podéis ver en el mapita que os he preparado, para que nos situemos :-).
Esta ruta formada por 4 pueblos es perfecta para un día completo. Nosotros la hicimos en uno de los muchísimos tours guiados en autobús que vais a poder contratar en internet. Por si os interesa, nosotros lo hicimos con Civitatis y resultó genial porque da gusto que te lleven en el autobús a todas partes, mientras la guía te explica las curiosidades del paisaje de los Países Bajos y las historias que van detrás… muy recomendable, de verdad!
La aventura comienza desde la estación de Ámsterdam y la primera parada es Zaanse Schans (imposible de pronunciar aunque practiques!!! jajaja). Se trata de un pueblo-museo artificial en el que han ubicado muchos de los molinos de la zona, como espacio etnográfico para preservar la historia de los Países Bajos, en una época en la que los molinos están casi en su mayoría en desuso a pesar de su grandiosidad en el pasado.
Es un sitio muy curioso, en el que os encontraréis a miles (millones) de turistas sorprendidos como vosotros que se pasean por la enorme explanada visitando uno a uno los muchos molinos que allí se encuentran. Os va a encantar y podréis haceros todas las fotos que queráis con los molinos y dejar así, un recuerdo chulísimo de vuestro viaje por tierras holandesas…
Muchos molinos se pueden visitar por dentro, unos gratis, otros de pago, y ver sus muchos usos. Os recomiendo que entréis al menos en el que se dedica a fabricar zuecos, súper turístico porque el guía os hará una demostración in situ y en vuestro idioma del proceso de fabricación de este calzado tan típico del país. A los niños, y no tan niños, les encantará.
En la puerta de este molino podréis haceros fotos con los famosos y divertidos zuecos gigantes…. como un buen turista más 🙂
Dos paradas más imprescindibles en este lugar: Cacao Lab y la Bakery… ambos os encantarán si sois amantes del dulce y de los comercios monos…. En el primero de ellos os podréis preparar un chocolate calentito en plan buffet, de modo que podréis serviros cada ingrediente y disfrutar de una delicia en el frío del exterior…
Qué bien sienta el chocolate calentito de CacaoLab
El segundo de los sitios, la Bakery, es no apto para locas de la repostería y la decoración vintage…. os aviso, después no os quejéis…. entraréis en una tienda que parece de cuento, con empleados perfectamente tuneados para dar un ambientillo aún más especial… es como entrar en una casita de juguete en la que cada esquina tiene un mueble mono y muchos, muchos complementos preciosos…. y además huele que te mueres!!! Cómprate alguna galletita o gofre y verás…. para morir!!!!
Desde este pueblo tan curioso, cogeremos el Bus y nos iremos a la siguiente parada…. la fábrica de quesos, cerca de Edam! Otro must en este viaje, por favor! No podíamos irnos sin ver una de esas fabricas de queso, así que nos quedamos encantados cuando nos enteramos que estaba incluido el plan dentro del tour.
Me encanta ver lo «tuneados» que van los dependientes/as…. con sus trajes típicos holandeses
La fábrica en cuestión es súper turistica! No os vayáis a pensar que es una gran fábrica de verdad, pero está genial y es divertido atender las explicaciones del holandés chapurreando el proceso de producción lácteo en español… después, marketing puro, os llevarán a la tienda en donde la gente compra quesos como si no hubiera un mañana!!!!
Posad con las lecheras de mentira que hay en la puerta… una foto entrañable donde las haya 🙂
En el aparcamiento podréis haceros fotos divertidas con las lecheras, zuecos gigantes o incluso fotos en el photocall… son bárbaras! Genial si no has podido hacerte fotos en el pueblo anterior por exceso de turistas!
¡Dejamos ya la fábrica de quesos turista para irnos a visitar Edam! Qué cosa más mona de pueblo, por favor: os va a encantar. Es como uno de esos pueblos de cuento, con sus casitas ideales, canales y barquitos… de verdad que vale mucho la pena. Visitad la escultura de los quesos y su canal principal para haceros unas fotos divinas, como las que pudimos hacer nosotros en familia :-). Esto es una minúscula prueba de lo que os vais a encontrar…
Disfrutad con las casas del gran canal… y ese curioso cenador que muchas tienen a sus orillas y que nos cuentan que antiguamente era para recibir visitas en casa
Sistema tradicional para transportar los quesos en Edam y que podéis ver en directo cuando celebran sus ferias
Podéis coger uno de esos quesos de mentira y haceros unas fotos estupendas para la posteridad 🙂
El puente es un lugar perfecto para haceros una foto, con el campanario al fondo y ese banco suspendido en el aire tan original
El campanario de Edam, al igual que otros muchos de los Países Bajos está ligeramente torcido y ello se debe a lo inestable del terreno ganado al mar
Después de deleitarnos con este pueblo de postal ponemos rumbo a Volendam, siguiente parada! Nos dirigimos hacia la costa a ver un típico pueblo marinero… y a comer rico en el restaurante que se ha encargado de reservar el tour: ¡comodísimo! Así que llegamos a Volendam y os dejan a las afueras para acercarnos caminando ya que es un pueblo muy chiquitín y de difícil circulación: gran sorpresa nos dimos cuando nos contó la guía que esábamos caminando por uno de los muchos diques que hay en la zona y pudimos comprobar in situ la diferencia de altura con el nivel del mar… ¡allí comprendimos porque se llaman Países Bajos!
Volendam es un pueblo 100% comercial. Su mayor atractivo es pasear por la calle comercial y entrar en las muchas tiendas de souvenirs que nos ofrece
Volendam se ve en tres segundos, es pequeñito, pero matón de lo bonito que es!!!! jajaja. Pasead por su calle comercial, entrad en sus tiendas tan monas y tomaros un bacalao tan rico como el que nos comimos nosotros…. un lugar perfecto para descansar un rato a la orilla del mar. Os encantará.
Tiene como un aire retro, ¿verdad?
Ponemos rumbo a nuestra última parada: Marken. Otra pequeña joya de pueblecito que nos ha dejado trastornados, la verdad. Se trata de un pequeño pueblo dormitorio que vive casi en exclusiva del turismo. En él no hay apenas comercios, ni restaurantes así que solamente se puede ir de paso a conocer sus canales y sus callecitas repletas de casitas de cuento.
Eso sí, viviréis acosados por las muchas bicis que amenazan con atropellaros… y es que nos dio la impresión de que los habitantes de este pueblo deben estar un poco hasta el moño de aguantar a tantos turistas…
Según nos cuenta la guía ésta es la estampa típica del pueblo, en la que todos, incluso nosotros, se hacen la foto recuerdo en Marken
Este pueblo está en una isla de modo que podéis acceder a ella bien en barco, desde Volendam, o bien por la carretera que han ubicado sobre el dique que la une con tierra firme: en este país los diques son multiusos! Así que es curioso cruzarlo con agua a ambos lados de la carretera como si de un puente sobre el mar se tratase.
Ruta de los Tulipanes
Viajar a Holanda en primavera tiene una especial ventaja y es que te permite tener el enorme privilegio de poder ver en directo la increíble floración de los campos de flores y tulipanes. Has oído bien, ésto solo ocurre en primavera y más concretamente entre marzo y mayo, más o menos, así que tenlo muy en cuenta a la hora de organizar tu viaje: vale la pena.
Era uno de mis grandes objetivos en nuestra turné holandesa (además de probar sus quesos o ver los molinos, claro) por eso fui un poco pesada hasta que, por fin, lo logramos. Me gustó tanto la experiencia que por eso he querido incluir este plan entre los «must» de los alrededores de Ámsterdam…. así que os cuento.
Lo primero es dar las gracias a Ana, de Ámsterdam en Bicicleta, por darnos las pistas clave para poder localizar los dichosos campos de tulipanes que tanto se ven en las postales, así que, va por ella!!! Además, tiene un blog bárbaro en el que vais a encontrar muchos planes interesantes.
Nosotros alquilamos un coche durante un día entero para poder explorar las tierras bajas con calma…. así que uno de los destinos de este tour en coche alquilado fue precisamente éste. La zona de los campos de tulipanes está al oeste de Ámsterdam, tal y como os indico en el mapa, y muy bien comunicada con la ciudad por lo que no tendréis problema en acceder a ella.
Para ver los tulipanes tenéis dos grandes opciones: visitar directamente el Jardín de tulipanes Keukenhof o hacerlo por vuestra cuenta, en plan aventura, parando en los campos que vayáis encontrando por el camino. Nosotros optamos por la segunda opción (somos muy aventureros, jejeje) y nos fuimos a recorrer mundo en busca del tulipán. Bueno, en realidad flores de bulbo, no solo tulipanes… narcisos y jacintos también, ¿cómo te quedas?
Primera opción, Jardín Keukenhof, del que todo el mundo habla verdaderas maravillas y que es una de las mayores atracciones turisticas del país. Podéis ir a pasar allí el día y disfrutar de los muchos paisajes creados con flores: si veis fotos os quedaréis muy impresionados, la verdad. Nosotros no fuimos porque preferimos combinar la escapada con otros pueblos y ver solo un ratito flores.
Segunda opción, lanzarse a la aventura del campo en flor que me parece divertidísimo y, además, te permite ver otras cosas aprovechando el desplazamiento hacia la zona de tulipanes, como después os contaré. No tenéis más que iros hacia la zona de Lisse y allí os toparéis con muchos campitos con floridas composiciones dignas de un buen selfie!
Os dejo link a este post de Ana en el que os explica todo lo que necesitáis saber de los campos de tulipanes y las claves para localizarlos y disfrutar a tope en ellos.
Haarlem
Aprovechando nuestro coche de alquiler hicimos varias visitas interesantes que os contaré a continuación y hasta terminar este post, así que en todos los pueblos que os describo a continuación el desplazamiento fue por nuestra cuenta y nos fue genial (aunque unos meses después nos llegase a casa la notificación de una multa … grrrrr).
Una de las paradas imprescindibles es Haarlem quién da su nombre al famoso barrio de Nueva York! Se trata de un pueblecito encantador en el que podrás dar un paseo por el canal, visitar su gran molino, o pasear por sus callecitas y parar en la plaza principal a tomarte algo o a visitar su iglesia, la Catedral de San Bavón (muy recomendable por ser un buen ejemplo de lo que supone una iglesia protestante y lo curiosa que es… con gran abundancia de tumbas en su interior…. tremendo!!!!).
Cuando nosotros visitamos este lugar fue muy curioso… parecía un pueblo silencioso y tranquilito hasta que llegamos a la plaza y nos encontramos con una súper feria en la que la noria daba vueltas y las atracciones giraban al rítmo de la enorme música y los gritos y animación de los allí presentes…. y todo a las 10:00 de la mañana!!!! Eso es lo que yo llamo, ambientazo!
Leiden
Seguimos nuestro recorrido y nos vamos a Leiden, mi pueblo favorito, sin lugar a dudas. Y es que Leiden tiene un encanto especial… a ver si os pasa lo mismo. Es pequeño, como todos los pueblos, pero tiene algo que te deja encantado. Allí hicimos una parada más larga para comer en uno de sus muchos restaurantes y para tomarnos un helado y pasear un buen rato…
Pueblecito de cuento en el que el tiempo parece haberse parado… fijaros en el puente con tejado del fondo… imprescindible cruzarlo 🙂
Os recomiendo que visitéis su tienda de Dille & Kamille (cadena de tiendas de cosas monas donde las haya)… allí fue donde compré los abanicos y guirnaldas mini de papel en azul y verde que puse en la primera comunión de Gonzalo y por las que tanto me habéis preguntado :-).
También os recomiendo que subáis al castillo y disfrutéis de las vistas del pueblo desde allí… os encantará.
Delft
Seguimos nuestro tour libre por tierras y pueblos holandeses y vamos hacia nuestra penúltima parada para llegar a Delft! Sí, supongo que os suena por su famosa porcelana, ¿verdad? y es que todo en este pueblo encantador recuerda a esos estampados, especialmente en tonos azules, tan típicos de esta porcelana… perderos en una de sus muchas tiendas en la que podréis encontrar cualquier objeto inimaginable tuneado en formato porcelana.
A destacar y no perderse, la gran plaza en la que veréis la preciosa iglesia, que, por supuesto, también tiene el campanario torcido como algo típico de las iglesias en los Países Bajos, las callecitas a orillas del canal o el gran molino que hay justo al lado.
Un dato importante a tener en cuenta y es que a las 18.00 horas cierran todos los comercios, pero no solo aquí, sino en todas partes, así que si queréis organizar visita a este pueblo y os interesa comprar algún objeto de porcelana tenédlo en cuenta para no llevaros la sorpresa de encontraros todo closed…
Os vais a hartar de ver gallos en lo alto de los campanarios de las iglesias… ¿sabéis porqué? Pues porque las que tienen gallo son protestantes y ésta es la religión mayoritaria en la zona
Nosotros nos libramos por los pelos del cierre de puertas, pero por muy poco porque aterrizamos en la plaza a las 17:45h y solo tuvimos 15 minutos para ver alguna tienda… después, nos dedicamos a pasear por las calles que también vale muchísimo la pena!!!
Gouda
Sí!!!! también existe el pueblo que da su nombre al otro famoso queso holandés (recordad que el otro que visitamos era Edam).. así que ya lo sabéis. Lamentablemente no tengo demasiadas fotos de este pueblo tan mono porque lo vimos más que nada dando una vuelta en coche…. era ya muy tarde y, la verdad, es que no podíamos con nuestro alma… y había dos bajas en el coche que se habían quedado zzzzzzzzz dormidos como tronquitos.
Pero os diré que es también muy bonito y os animo a que os acerquéis a verlo también: muy parecido al resto, con su canal, sus casitas de ladrillo preciosas y ese encanto especial que tienen aquí todos los pueblos.
La costa: Noordwijk
Como buena familia aventurera con coche de alquier no quisimos dejar de aprovechar que estábamos cerca del mar y acercarnos a ver la costa, por curiosidad por saber cómo son las playas de Holanda y cual fue nuestra sorpresa al encontrarnos con unas playas alucinantes, de arena blanca y acompañada por el tiempazo que tuvimos en pleno mes de abril un verdero lujazo para turistas como nosotros.
Curioso punto de encuentro de objetos perdidos 🙂
Y para que veáis que no miento, mirad qué fotito tan apetecible…. la hice a pie de playa al lado de un tremendo chiriguito deluxe que quitaba el sentido: daba ganas de sacarse el plumífero y tumbarse en una de esas tumbonas a tomar un ratito el sol.
Y hasta aquí nuestro tour por pueblos y rincones encantadores cerca de Amsterdam. Si vais con tiempo, no dudéis en reservar al menos un día para ver los que podáis porque vale mucho la pena: de hecho, os contaré un secreto… a mí me gustó más recorrer los pueblecitos que la propia ciudad de Ámsterdam… pero ya se sabe que yo soy muy de pueblecillos así que no es muy sorprendente que así haya sido.
Un destino más que hemos tenido la suerte de disfrutar… pensemos ya en el próximo!
Mil besos y hasta otro día…. ah! y más destinos en Celebra con Ana, no os olvidéis.
