No podéis imaginaros las ganas que tenía de pintar calabazas de color rosa!!! Desde que Adelaida me encargó hace tiempo el Kit Halloween Rosa, me entraron unas ganas irrefrenables de ponerme a probar esta manualidad!!! Hoy, por fn os enseño el resultado de este DIY tan especial…. os presento mis Calabazas Rosas!!!!
Las preparé como elemento central de la decoración de la mesa de mi cumpleaños, como parte de la Pink Lady Party que os presentaba hace unos días. Prepararlas es facilísimo y, si sois aficionados a las manualidades como yo, os encantará hacerlas en casa, así que tomad nota de lo que vais a necesitar:
- Calabazas, tantas como queráis y en las formas que os apetezcan: todo vale, así que no os cortéis y recopilarlas a vuestro gusto.
- Chalk Paint o pintura a la tiza de un par de tonos rosas, para que hagan contraste y le deis más vidilla al bodegón. Es la pintura que os recomiendo porque he probado en otras ocasiones con pinturas acrílicas y témperas y lo cubren ni la mitad de bien y, lo que es peor, con el paso de los días tienden a desconcharse como me pasó con las Calabazas de Navidad.
- Mini brochas o pinceles: yo adoro los que venden en la zona de niños de Ikea, vienen en paquetitos y están genial de precio, así que si os gusta pintar os recomiendo que os hagáis con algún lote 🙂
- Adornos variados para decorarlas: yo he utilizado, tiras adhesivas de perlitas, a la venta en cualquier bazar, limpia-pipas rosa y purpurina del color que os apetezca (en mi caso opté por la purpurina rosa). Todo ello podéis encontrarlo en las tiendas de manualidades o incluso en los bazares chinos.
Lo primero que debéis hacer es pasar un paño humedo a las calabazas, para sacarles cualquier resto de polvo, grasa o tierra y que la pintura nos quede perfectamente adherida a la superficie.
Agitamos las pinturas y nos ponemos manos a la obra a pintar nuestras calabazas. Tened en cuenta que vais a tener que pintarlas poco a poco para aplicarle pintura tanto por arriba como por abajo y, además, tendréis que darles un par de capas para que se queden perfectamente cubiertas. Dejad que cada mano seque bien antes de aplicar la siguiente y sed pacientes que os van a quedar genial!!!
Si queréis decorarlas con las perlitas, tendréis que pegarlas sobre la calabaza y después pasar la brocha bien por encima para que se cubran de pintura. También tenéis la opción de pegarlas sobre la calabaza ya pintada y que queden las perlitas con su color haciendo contraste… esto lo debéis hacer a vuestro gusto. Yo estuve dudando, pero al final decidí pintar todo del mismo color.
En el caso de las calabazas con purpurina tenéis que aplicar las dos capas de pintura y una vez aplicada la segunda capa y antes de que se seque la pintura, aplicar la purpurina para que ésta se quede bien pegada por su superficie. ¡Dejáis secar y listo!
Y hasta aquí el DIY de hoy, espero que os haya parecido apetecible y que o animéis a prepararlas, ya sea para decorar vuestras casas, o para decorar la mesa, como hice yo en mi Pink Lady Party!
La verdad es que son bonitas las mires por donde las mires…
Ups, por cierto, si quieres decorarlas en los colores de la navidad, puedes visitar este otro link y verás qué chulas me quedaron también… perfectas para decorar vuestras mesas las próximas Navidades ♥
Besiños y hasta el próximo día 🙂
Que bonitas Ana! Las de las perlas, yo pensé en un inicio que eran chinchetas!!. Enhorabuena
Hola Rosalina!!!! Qué bien tenerte por aquí :-). Es verdad! Parecen chinchetas!!!! Pero nada más lejos de la realidad!!! jajaja. Ya ves que es aún más fácil de lo que puede parecer, ¿verdad? Un besazo guapísima
Ana ♥