Llevaba ya muuuuchos años queriendo preparar calabazas de tela fáciles, pero, por una cosa, o por otra, al final nunca me daba tiempo y se pasaba la temporada de otoño de largo…
Este año me hice el firme propósito de prepararlas y hoy, por finnnn, os las traigo al Blog, en un post más de manualidades fáciles, de las que a mí me gustan…
Decorar con calabazas las casas es algo que está muy asentado en otros países, como en Estados Unidos. Basta con buscar un poco en Internet para enamorarse de esas entradas exteriores, o esos halls repletos de calabazas de miles de formas y colores.
Al ver todas esas calabazas y decoraciones siento mucha envidia!!!! Porque aquí, en España, es muy difícil conseguir calabazas bonitas, más allá de las que venden en los supermercados por Halloween…
Por eso, la idea que os traigo hoy me parece bárbara, para poder solventar esa limitación tremenda que tenemos los amantes de calabazas…. anímate y prepara las calabazas de tus sueños…. es tan fácil (y adictivo) que no podrás parar y querrás más!!!
Las que os enseño hoy son solo unas pocas de las que pienso hacer este año…. ahora que le he cogido el truquillo, no se puede desaprovechar…
Materiales que vamos a necesitar
Los materiales son de andar por casa, ya veréis…
- Retales de tela variados, incluso mangas de camisas, de jerseys, o «piernas» de pantalones que hayáis cortado… son perfectos para que hagáis vuestras calabazas!!!
- Cuerda, lana, cordón natural…. para atar
- Relleno de cojín o algodón. Yo he utilizado el relleno de un cojín viejo, así reciclamos!!!
- Tijeras
Pasos que tenemos que seguir
PASO 1: PREPARAMOS LA TELA
Cortar rectángulos de tela del tamaño que os apetezca hacer vuestras calabazas. Tened en cuenta que habrá que doblarlos por la mitad y necesitaremos que sigan teniendo forma de rectángulo, para que tengamos tela sobrante para hacer los rabitos.
Doblamos enfrentando lado bueno, contra lado bueno.
Cosemos los laterales, o pegamos con pistola de silicona caliente (como he hecho yo) para formar una especie de bolsita.
PASO 2: ANUDAMOS LA BASE Y RELLENAMOS
El siguiente paso es atar la base de lo que será nuestra calabaza, es decir, la base que no se abre. Cogeremos un trozo de cuerda, lana o lo que queráis y ataremos bien fuerte para con dos nudos, para que nos se nos separe al rellenar.
Damos la vuelta a esta especie de saquito que hemos construido y rellenamos con relleno elegido, apretando para que quede bien pegado a las paredes y nos quede la calabaza bien gordita. Atamos con la misma cinta que vayamos a usar por fuera, con doble nudo, dejando un poco que cuelgue para atar después.
PASO 3: DAMOS FORMA A LA CALABAZA
Atamos la cuerda a la base de lo que será nuestro rabito y nos ponemos a darle vueltas sobre la tela sobrante, bien fuerte, construyendo el rabito de la calabaza… de abajo hacia arriba y de arriba hacia abajo hasta atar con el trocito que habíamos dejado suelto antes. Hacemos unos buenos nudos. Cortamos el sobrante de tela que pudiese quedarnos por arriba, para que el rabito quede impecable.
Lo último será darle a nuestra calabaza su particular forma de gajitos, para lo cual ataré cordón en la base y sin cortarlo de la madeja, procederemos a darle vueltas desde arriba, hacia los lados, pasando por abajo y volviendo hacia arriba, dando vuelta por la base del rabito y siguiendo por toda la calabaza hasta terminar de formar los 8 «gajos». Al terminar, hacemos un nudo, en la base del rabito, en donde acabamos el trabajo.
Si la base del rabito nos queda fea, la embelleceremos dando más vueltas con el cordón o lana, hasta tapar esas imperfecciones y conseguir el acabado perfecto.
Es facilísimo, creédme, os va a encantar fabricar vuestras propias calabazas, ya veréis…. si os lanzáis mandádme fotos de vuestras obras para compartirlas en Instagram ♥
Muchos besos y hasta el próximo día!!!